Y de repente descubres la riqueza de tu vida.... y la ves reflejada en la cara de tu gente, en su sonrisa, en su ilusión por sorprenderte.
Cuantas emociones se mezclan, cuantas lágrimas....
Sólo sabes decir gracias... gracias por todo lo que aportáis a mi vida... gracias por estar ahí ahora, gracias por vuestra fuerza en estos momentos...
Hoy brindo por esos amigos con los que he compartido pequeños y grandes momentos. Aquellos que ni el tiempo ni la distancia son capaces de alejar... aquellos con los que siempre empiezas una conversación con un "decíamos ayer".
Brindo por todos mis hermanos, que siempre están cuando los necesito. Grandes personas, generosos, luchadores, pero, sobre todo, muy humanos...
Angela, confidente, fuerte, valiente, a mi lado, imprescindible en estos momentos de mi vida... gracias. Sole realista, sincera, cariñosa... siempre cerca en la distancia. Fede silencioso, sensible, entrañable... muy familiar. María sonriente, optimista, luchadora... todo es posible con ella. Cristina mágica, soñadora, gran relaciones públicas, generosa, curranta... nada se le pone por delante cuando quiere que alguien cumpla un sueño. Juan mudito misterioso con una gran riqueza interior, que ve la vida a través de su cámara... con un solo abrazo es capaz de transmitir toneladas de cariño, fuerza y energía. Teresa, mi Teresa... mi niña, esa gran mujer independiente pero cercana, resolutiva, pero sobre todo muy muy cariñosa.
Brindo por mi madre, grande, única, adorable... se multiplica para llegar a todo. No sabes cuanto te agradezco lo cerca que estás de mi en estos momentos que tanto te necesito.
Brindo por mis tres hijos. Son mi fuerza, mi alegría. Estoy orgullosa de ellos, de cómo crecen y se superan día a día... de los tres hombres maravillosos en los que se están convirtiendo.
Y brindo por mi marido, ese ingeniero cuadriculado que se está transformando en mi príncipe azul. Siempre cerca, siempre a mi lado, en mis alegrías y en mis silencios, en mi intimidad y en mi distancia... Gracias Jose.
Me hubiera gustado haber sido capaz de verbalizar este brindis ante toda esa maravillosa gente que se reunió ayer para sorprenderme y felicitarme.
El mejor regalo del día. Mi amiga Ana, hoy de guardia en la JD, me ha llamado para darme una gran noticia: el ganglio centinela ha salido negativo.
Vamos muy bien. Brindo con todos vosotros.
Ana
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