SE PUEDE PREDECIR EL FUTURO: LOS EGIPCIOS YA LO HACIAN

Sobre el parte médico vamos a pasar rápidito. La verdad es que esta última sesión ha sido bastante dura, vomitando casi todo el rato. La enfermera que tengo, Leticia, a la que conocí princesa y ya es reina, lo pasó fatal, pero me cuidó muchísimo. Por eso prefiero olvidarla cuanto antes. La recuperación está siendo pesadita. Todas las mañanas me propongo que sea el último día de barco, y en cuanto paso mas de un par de horas bien ya me vengo arriba y digo se acabó. Desgraciadamente no siempre funciona, pero lo más importante es que consigo olvidarlo de una vez para otra. Espero que no quede mucho de idas y venidas. Ya solo falta una sesión de esta medicación, a finales de agosto empezamos otra tanda de cuatro con una nueva medicación. Por lo demás me encuentro bien y las defensas se van manteniendo. Ya queda  menos.

Creo que es mucho mas saludable abrir debate con vosotros sobre otros temas. Y hoy os propongo hablar del antiguo Egipto, de astrología y de un campesino que vivia a la orilla del Nilo al que se le movía la casa. Espero que lo encontreis interensante..



Mi hermana Angela es astróloga, y además una gran astróloga, por lo que estoy muy acostumbrada a ver cómo la gente viene a preguntarle cosas y luego le dice que "acierta", para gran cabreo de ella.
Explica y explica que ella no acierta, que ha estudiado mucho, lo cual es verdad y lo puedo corroborar. La astrología es una ciencia muy importante. Históricamente ha sido muy desacreditada, pero veamos porqué. 

Hoy estaba leyendo un artículo de la revista Muy Interesante sobre el antiguo Egipto. Los egipcios fueron un pueblo que se acostumbró a planificar muchísimo, ya que vivían en una franja de tierra pegada al Nilo en la que la diferencia entre vivir en una zona o en otra era estar en una tierra fértil o vivir en el desierto. Además su agricultura estaba condicionada por las crecidas del Nilo. Imaginaros que a alguien se le hubiera ocurrido sembrar justo antes de la crecida... evidentemente hubiera perdido la simiente y la cosecha. Por este motivo observaban el río y se adaptaban a sus cambios.

Pero vayamos al dato curioso que hoy me ha llamado la atención: los egipcios, hace 5.000 años, antes de los faraones, observaban el cielo, y se dieron cuenta de que a mediados de verano la estrella Sirio se dejaba de ver durante un periodo de setenta días, y que luego reaparecía siempre por el mismo punto (oriente) y a la misma hora (al amanecer). Pero hay otro dato más: la crecida del Nilo se producía de forma inminente, unos días mas tarde.

¿Esto quiere decir que Sirio provocaba la crecida del Nilo? Sería pueril llegar a esa conclusión, porque la estrella ni abre un grifo, ni hace que aumente la lluvia. La explicación más lógica es que el Nilo tiene un ciclo de crecidas anual y que coincide con la aparición de Sirio en el horizonte y eso tiene consecuencias.

En la naturaleza todo tiene su ciclo, pero en ocasiones ese ciclo es muy superior a nuestra propia supervivencia, por lo que negamos la repetición de un hecho que pudo acontecer hace mucho años. Por otro lado, los datos históricos de lo ocurrido, pueden no dar cuenta del fenómeno, sino solamente de sus consecuencias.

Pongamos un ejemplo: si un campesino vive al borde del Nilo y no ve lo que ocurre aguas arriba u observa su entorno de forma sesgada, puede llegar a la conclusión de que cuando Sirio aparece en el horizonte, después de setenta días oculto, "su casa se mueve" y se acerca al río. Os parecerá un ejemplo muy grotesco, pero es una de las cosas que pueden ocurrir cuando un astrólogo, con falta de visión de conjunto, hace una interpretación.

Cualquier ingeniero que se precie hace un cálculo de las recurrencias de las avenidas antes de  dimensionar un puente. El volumen de las mismas varía en el tiempo, y la máxima avenida puede suceder cada 100 años, pero si no lo tiene en cuenta, en 100 años una avenida puede destruir su obra. 

Luchar contra la naturaleza es una de las cosas que los hombres han hecho en lo últimos tiempos, y en muchos casos sin respetar las leyes naturales, y sintiendose superiores a ella.

Sólo la observación y el estudio concienzudo de las cosas puede dar una información objetiva de los hechos. Pero vayamos al ejemplo del campesino. Si una avenida tiene una recurrencia de 100 años, y alguien, 20 años después de que ocurra una, construye una casa en el cauce del río, sin informarse sobre la historia de esa zona, en dos o tres generaciones la casa se inundará o será arrastrada por el río. Del mismo modo un astrólogo podría predecir ruina y muerte para la familia. Quizá otro astrólogo, en el mismo río pero en otra zona, puede predecir que habrá riqueza en la familia, ya que la cosecha de los próximos años mejorará mucho por que el río enriquecerá las tierras con limos. Ambos tendrán razón, pero darán información contradictoria. 

El buen astrólogo será el que sepa predecir una máxima avenida, y ver las circunstancias de cada uno con respecto a esa crecida y por tanto las consecuencias del fenómeno que va a ocurrir.

Los signos del zodiaco, las casas de la carta no son más que sistemas de localización universal que utilizan los astrologos para determinar la situación exacta de un planeta y predecir su trayectoria.

A todos nos parecería ridículo que un avión se identificara y explicara su localización diciendo que está muy cerca de Murcia... ese dato no es muy exacto y puede dar lugar a errores: en Lorca, en Santiago de la Rivera... Esas inexactitudes son impensables en el siglo 21. Ahora se usa la longitud y la latitud para dar información sobre la localización exacta de un punto en la tierra.

Del mismo modo los astronomos localizan los planetas y los referencian a las constelaciones que ven detrás, indicado grados minutos y segundos. El sol pasa por delante de la constelación de Acuario o Geminis una vez al año, y además con una velocidad determinada, eso nadie lo cuestiona. Lo que ocurre es que, históricamente, se ha observado que cuando el sol pasa por un determinado punto, pasan cosas. El buen astrólogo es el que es capaz de predecir la avenida (siguiendo el ejemplo anterior), y no confundir a la gente con tendencias a que haya muertes o mejore la fertilidad de la tierra.

Para resumir os diré que considero que la astrología es una gran herramienta de planificación. Si conocemos que hay una tendencia a que ocurra algo podremos potenciar las cosas positivas y evitar o minimizar los daños o peligros que se avecinan.

Por eso cuando Angela dice que hay una oposición de plutón al sol natal, o una cuadratura de saturno a la luna natal, o un trigonazo de jupiter al venus natal, solo habla de posiciones relativas, y luego cuenta la tendencia de cosas que pueden pasar, porque, históricamente, esas posiciones relativas ya han ocurrido antes, y miles de estudiosos han dejado un testimonio de lo que ocurrió, y ella, como otros fantásticos astrólogos que conozco, se lo ha estudiado.

Como veís no es cuestión de creer o no creer, es cuestión de conocer o no conocer.

El próximo día 26 de Julio, la luna nueva estará en la constelación de Leo, y será un buen día para sentarse a escribir nuevos objetivos... sobre todo del corazón.... Pero eso os lo cuenta Angela en el próximo post

Gracias a todos por estar ahí. Seguimos.

Ana