UN BUEN LIDER

Lucha siempre junto a los que quieres, así su victoria será tu victoria

Cuando un chaval de 16 años te dice que su mayor sueño en la vida es llevar a su equipo al triunfo para que disfruten lo que se siente cuando se gana, te das cuenta de lo que es un lider.

Con pocos años, y de forma intuitiva, busca una motivación para los demás, un mensaje que haga que se esfuercen para alcanzar una meta. Esto demuestra que un lider no tiene que ser una persona con muchos años, con mucha experiencia, o con mucho poder... Cualquiera puede ser líder en el entorno en el que le ha tocado vivir.

Por otro lado ser líder tiene ventajas y responsabilidades. La mayor ventaja es que consigues rodearte de personas que colaboran, con sus habilidades y aptitudes, para alcanzar un proyecto común con el que sueñas. Eso es gratificante. La principal responsabilidad de un buen líder es escuchar y ayudar a los demás a superar sus limitaciones. Obtener la mejor versión de cada uno.

Las personas que tienen esta habilidad natural, tienen una carácter que atrae como un imán a otros hacia ellos, dispuestos a colaborar, a ayudarles a conseguir sus metas. Pero ¿por qué?? Porque un buen líder es capaz de compartir un triunfo. 

Todo esto es la parte teórica... Muchos pueden pensar que ellos nunca lo conseguirán, pero lo cierto es que, a pesar de que hay personas que son capaces de hacer esto de forma natural o intuitiva, esta habilidad también se puede "entrenar" mejorando nuestra empatía, nuestra capacidad de escuchar, de negociar y de argumentar.

Vayamos a la parte práctica. No voy a inventar la pólvora, hay muchos psicólogos y gurús que han escrito libros y libros sobre liderazgo y técnicas para mejorar. Pero hoy te propongo empezar por algo sencillo: a cada uno de los miembros de tu equipo hazles esta pregunta: ¿para qué trabajas en esto?. Averigua lo que aporta a cada una de las personas que trabajan contigo lo que estaís haciendo. Te dará un información muy valiosa del equipo: su motivación.

Si la respuesta que recibes es ambigua, poco clara o poco potente, ese es tu momento. Ya puedes empezar a buscar argumentos para motivar a esa persona. Hay ocasiones en las que tu interlocutor no se siente capacitado para realizar la tarea que le has encomendado: pues fórmale y demuéstrale que puede. Otras veces te puedes encontrar con personas a las que la propia experiencia les ha demostrado que eso no funciona: analiza los conocimientos que te aporten, encuentra qué cosas no funcionaron en el pasado y mejorarás el trabajo actual. Puede haber miles de motivos... encuentralos y actua para mejorar la actitud de esa persona.

Me imagino que en este momento te estarás preguntando que de dónde sacas tiempo para hacer todo eso. Cualquier momento es bueno, lo puedes hacer en el día a día, de forma casual, tomando un café... Pierde un minuto para ganar un equipo que te siga, con el que alcanzar grandes metas.

Suerte, espero que lo consigas, es muy gratificante.

Ana